Un tomo más… y nada más que eso, otro tomo. No deja de resultar curioso como tras 67 tomos de nueva hornada y los anteriores (no tengo nada claro cual es la numeración real de la serie a estas alturas xD) todavía hay tomos en los que no pasa absolutamente nada, pero NADA de NADA.
Y no es que pretenda que la serie acabe ya, ni que tenga que avanzar de una vez al menos un año en el futuro (que tiene webos que todavía no hayan pasado a la universidad… aunque claro, viendo lo que va Ran a clase no me extraña por otra parte) pero leñe, un avance que no signifique una trama nueva no estaría de más. O que haya algún avance real, que todo lo que vimos hace ni lo se cuantos tomos solo sirvió para cerrar algunas tramas abiertas anteriormente pero nada que realmente haga pensar que pueda haber un avance en la trama real.
¿Por lo demás? Pues un tomo como cualquier otro, con un par de asesinatos repartidos entre Kogoro y los detectives infantiles, con la participación especial de la policía. Al menos ahí vemos un avance, ya que por fin la relación entre Sato y blablabla parece que lleva a alguna parte, que ya era hora, que parecían más parados que… bueno no, parecían igual de parados que el resto de parejas de la serie, a cada cual más, más… aggggg.
En fin, que poco aporte, aunque por otra parte ya estoy acostumbrado... tengo la sensación de que esta es una de estas series que ya compro casi por inercia, a ver si algún día pasa algo de una vez. Sinceramente, si no fuera porque me gustan tanto las historias de asesinatos... haría muchos tomos que hubiera pasado ya de ella.
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